La disminución de la demanda y caída de precios a causa de la pandemia ocasionaron el cierre de varias operaciones.

Muchas grandes economías dependen del petróleo y Colombia no es la excepción. Es imperativo entonces que la industria de los hidrocarburos se recupere, pues de esta depende una gran cadena de valor que pasa desde la obvia producción de gasolina para la movilidad, la producción de plástico, ropa, hasta la producción de tubos pbc utilizados para diferentes fines industriales; es decir probablemente un 70% de todo lo que utilizamos hoy, proviene del petróleo.

Debido a la pandemia generada por el Covid-19, a la guerra de precios y a la sobreproducción de crudo que ocasionó la caída en los precios a escala mundial, este sector ha pasado por su peor momento histórico. Según José Pérez, ingeniero de perforación de pozos de petróleo en Colombia con más de 20 años de experiencia en el campo, “la industria petrolera pasó por su peor momento histórico entre mayo y junio de 2020”.

Según datos de la Cámara Colombiana de Petróleo, Gas y Energía (Campetrol) el país mostró en 2020 una disminución en la producción de crudo del 18,1% respecto al 2019. Es así como “la producción para la primera mitad del año fue de 813 KBOPD, por lo que se evidencia una caída frente al primer semestre de 2019 cuando la producción de petróleo se situó en 894 KBOPD”. El gas natural sufrió el mismo efecto en junio con una caída de un 15% frente al mismo periodo de 2019.

Esto se da, según Pérez, debido a diversos factores, entre los que está la disminución de la demanda, por lo tanto los precios caen. A la caída del precio se deben cerrar los pozos y “muchas compañías  cancelaron sus campañas de perforación para producción de hidrocarburos, todo esto a raíz de la pandemia y de los bajos costos”. Además, el cierre de fronteras municipales no permitió la movilidad de los trabajadores a pozo y por lo tanto se generó la clausura momentánea de operación por temas de bioseguridad, concluyó.

Los países pertenecientes a la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y aliados no miembros buscaron a inicios de 2020 llegar a un acuerdo para el recorte en la producción a fin de evitar la sobreoferta pero no lograron la meta. Países como Rusia y Estados Unidos aseguraron que mantedrán su producción. Es así como entre marzo y abril de este año se generó una sobreproducción de crudo, copando la capacidad de almacenamiento y obligando a los países comparadores a mantener almacenado el petróleo obtenido a muy bajo costo. Es ahora cuando lo que se está produciendo no se está consumiendo, sino que se está usando las reservas compradas con anterioridad.

Por su parte Campetrol indica que “el inicio de una guerra de precios del petróleo que llevó inicialmente a una sobreoferta de crudo y que terminó siendo contenida, al menos temporalmente, por medio de una política de recortes de los principales productores mundiales”, hizo que los precios bajaran y esto, aunado a la pandemia, hizo que los pozos cerraran. Es por ello que a inicios del año Colombia contaba con 136 pozos activos para pasar a 42 en esa categoría.

Asimismo, el consumo de combustible disminuyó en un 45% al segundo trimestre de 2020 comparado con el mismo periodo de 2019. La pandemia generó una detención de los viajes aéreos y terrestres además de la inmovilización de las ciudades.

Si bien el panorama mundial actual es desalentador, una vez que se logren normalizar las actividades y abrir las economías se espera que la industria petrolera se empiece a recuperar. Según Pérez “se ha venido recuperando gracias a los esfuerzos que se han hecho en cuanto a la producción, y gracias a que las diferentes economías empezaron a abrirse. Si se abren las economías se mejorará la industria del petróleo”, concluyó.

Por su parte, Campetrol asegura que los países en los que su renta es petróleo – dependiente como la colombiana, la situación es muy compleja y tardará años en recuperarse. “Esta crisis va a incidir profundamente en la economía nacional y debemos prepararnos para una lenta recuperación” aseguró.