Hasta el momento, el gobierno ha determinado levantar la inmovilización social obligatoria el próximo 10 de mayo, pienso que deberíamos ser muy cuidadosos en esta decisión y en su implementación, sobre todo, por el incremento de personas afectadas y fallecidas que se han registrado en las últimas semanas, como resultado de no acatar las normas de seguridad por un número importante de la población.

El objetivo es evitar que, durante el levantamiento gradual de la cuarentena, se incremente el número de fallecidos tal como sucedió en España e Italia. Definitivamente, es un problema de salud pública de un país en crisis, pero que también implica un gran problema económico al tener las empresas sin operar.

La idea sería reiniciar actividades de muy bajo riesgo y alto control sanitario. Según un miembro de la Comisión de Reactivación creada por este gobierno, el Perú pierde S/ 1,500 millones por día al no producir, ya se ha perdido S/. 60,000 millones desde que inició la cuarentena.

Toda esta situación obliga que, para el reinicio de las actividades productivas, las empresas implementen nuevos protocoles de Bioseguridad y Salud Ocupacional. En el caso de las empresas de los sectores industria, minería y energía productivas, deben de confirmar y mostrar los nuevos protocolos para garantizar la seguridad y la vida de los trabajadores a fin de evitar que se infecten en sus centros laborales.

Sin estos nuevos protocolos no se podrían reiniciar labores, y debemos ser muy estrictos en su cumplimiento.

Debido al COVID-19 las empresas en estos sectores deben realizar cambios sustanciales en sus protocolos y en la cultura interna en temas como: uso de equipos de protección personal acorde con el nuevo protocolo sanitario, capacitación permanente para el cuidado de salud tanto en el trabajo como en el hogar, control sanitario permanente, protocolos sanitarios para la logística de ingresos de insumos y salida de la producción en la mina por ejemplo, protocolos en la alimentación dentro de la planta, evaluación psicológica continua, entre otros.

La vida humana no se puede recuperar, el tema económico lo podemos resolver con el esfuerzo de todos, y esto involucra al gobierno, empresas y trabajadores. Muy importante el apoyo social a las personas que no forman parte del sector laboral formal.